Por qué el tamaño del cerebro humano se redujo en los últimos 100 mil años

Por qué el tamaño del cerebro humano se redujo en los últimos 100 mil años

Los cerebros humanos son hoy en día 13% más pequeños que el de nuestros antecesores. CLAUDIO QUILODRÁN

 

 

 





En un hallazgo que podría cambiar la comprensión que tenemos de la evolución humana, recientes estudios revelaron que los cerebros humanos modernos son aproximadamente un 13% más pequeños que los de sus antepasados de hace 100.000 años. Esta disminución planteó una pregunta intrigante a los investigadores: ¿es consecuencia del cambio climático o está relacionada con algunas de las habilidades cognitivas que hemos desarrollado?

Tradicionalmente la comunidad científica sostenía que el “gran cerebro” es la característica distintiva de nuestra especie en comparación con otros animales. Nuestra capacidad para pensar e innovar nos permitió crear las primeras expresiones artísticas, inventar la rueda e incluso alcanzar la Luna. En efecto, cuando se compara con otros animales de tamaño similar, el cerebro humano es gigantesco. En los seis millones de años desde que compartimos un ancestro común con los chimpancés, el cerebro humano casi ha cuadruplicado su tamaño. No obstante, estudios recientes indican que esta tendencia se ha revertido en los últimos 100.000 años.

Un estudio reciente dirigido por el paleoantropólogo Ian Tattersall del Museo Americano de Historia Natural de Nueva York rastreó los volúmenes craneales de antiguos homínidos. El experto encontró que la expansión cerebral ocurrió de manera independiente en diferentes especies y regiones, incluyendo Australopithecus afarensis, Homo erectus, Homo heidelbergensis y Homo neanderthalensis. Sin embargo, esta tendencia se revirtió con la llegada de los Homo sapiens, cuyos cerebros son ahora un 12,7% más pequeños que los de sus antecesores de la última Edad de Hielo.

“Tenemos cráneos de formas muy peculiares, por lo que los primeros humanos son muy fáciles de reconocer, y los primeros tienen cerebros extremadamente grandes”, señaló Tattersall.

Ante la incógnita de cómo se puede explicar esta sorprendente reducción cerebral, el paleoantropólogo sostiene que el motivo podría estar relacionado con un cambio en el estilo de pensamiento, que él denomina “procesamiento simbólico de la información”. Es decir, pensar de una forma más abstracta para comprender mejor. Este cambio que apunta Tattersall coincide con la invención del lenguaje, que reorganizó las vías neuronales de una manera más eficiente.

Más detalles en INFOBAE