Evo Morales quiere aislar la región cocalera el Chapare de Bolivia

Evo Morales quiere aislar la región cocalera el Chapare de Bolivia

Evo Morales (foto: Luciano Gonzalez)

 

 

 





El ex mandatario busca controlar esa región cocalera para ampliar los cultivos de coca con destino a las fábricas instaladas en los parques nacionales cercanos.

Por infobae.com

El ex presidente Evo Morales dice que el gobierno de Luis Arce envía “infiltrados” a la región cocalera de Chapare y anuncia que, como respuesta, él creará una fuerza de “ronderos” armados para cercar y aislar la región.

El anuncio se hace a pocos días de que los cocaleros de Morales impidieron que el vicepresidente David Choquehuanca circulara por Chapare, en el centro de Bolivia, en el departamento de Cochabamba, y le dijeron que no podía llegar allí sin autorización.

Morales denunció que el ministerio de Gobierno capturó 1.400 kilos de cocaína en el parque nacional Isiboro-Sécure, pero que informó haberla tomado en Chapare y, lo peor, que sólo se refirió a 700 kilos.

Agricultores de los valles próximos a la zona denunciaron que los cocaleros de Chapare están ocupando, con cultivos de coca, los parques nacionales Carrasco, Amboró e Isiboro-Sécure desde hace diez años, con la complicidad del gobierno central.

Por el momento, el “Gran Chapare” cubre unos 40.000 kilómetros cuadrados, más o menos como Suiza, sobre los que Morales querría tener control para ampliar los cultivos de coca con destino a las fábricas instaladas en esos y otros parques.

El cocalero jefe, al que sus seguidores llaman ahora “comandante”, dijo en radio Kausachum Coca que se propone frenar a los “infiltrados” del gobierno de Bolivia mediante la creación de grupos de “ronderos”, imitando lo que hicieron los campesinos peruanos.

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Indignado, Morales dijo que el ministerio de Gobierno envía “espías” a la zona pero que sin embargo no fue capaz de frenar el ingreso de mafiosos colombianos y brasileños a pesar de que había sido advertido de ello el año pasado.

Cuando el cocalero hacía estas denuncias, el gobierno informaba que cuatro ciudadanos fueron asesinados a balazos en la ciudad fronteriza con Brasil de San Matías, convertida en la “Ciudad Juárez” o en “Rosario” de Bolivia por la presencia de grupos de narcos armados.

Allí se enfrentan narcos brasileños del paulista Primer Comando da Capital con los del carioca Comando Vermelho, como un desborde de las luchas que tienen esos dos cárteles dentro de Brasil.

Es la primera vez que Morales anuncia medidas que confirman los temores de que el poder económico de Chapare quisiera aislarse del Estado boliviano y también es la primera vez que alude a los parques nacionales colindantes que serían absorbidos por el poder cocalero.

Cocaleros y simpatizantes del MAS en el Chapare (Reuters)
Cocaleros y simpatizantes del MAS en el Chapare (Reuters)

Nunca antes, además, había hecho una demostración tan clara, como la que hizo ahora, del conocimiento detallado que tiene sobre las cargas de droga que circulan en el territorio que está bajo su dominio.

Los parques que rodean a Chapare pertenecen a las jurisdicciones del departamento de Cochabamba (Carrasco), de Beni (Isioboro-Sécure) y Santa Cruz (Amboró), aunque éste último es el más extenso.

El poder económico de los cocaleros de Chapare invade diversas áreas y actividades, sobre todo en Santa Cruz, donde ha logrado controlar la venta de arenas para la construcción con camiones que llevan el producto a regiones muy lejanas, incluso muy próximas a la frontera con Brasil. Los areneros de la zona dicen que es muy sospechoso que la arena de Chapare cueste menos que la obtenida en los ríos propios, siendo que debe recorrer más de 360 kilómetros. Salvo, dicen, que lleven otras cargas debajo de la arena.

Es tanto el poder del Chapare que los tradicionales agricultores de los valles colindantes han sido arrebatados de sus tierras por la oficina de la reforma agraria para beneficiar a nuevos cultivadores de coca.

La furia de Morales, en este momento, se debe a que el presidente Arce le está ganando en la competencia por controlar el partido MAS al que ambos pertenecen.

Tan molesto está el cocalero que ahora asegura que casi todos sus compañeros le han dado la espalda y sospecha que en 2019 cayó en una trampa cuando renunció y escapó al exterior.

Pero lo que no se perdona es haber designado a Luis Arce como candidato de su partido en las elecciones de 2020, un pupilo que ahora le da las espaldas y avanza en su propósito de ser el candidato del MAS también en 2025. Él cree que designar a Arce como candidato también fue producto de la “trampa”.

Todo esto en medio de la peor crisis económica de este siglo en Bolivia, que estalla cuando es presidente el que fue ministro de economía durante trece años en el gobierno de Morales.