Luis Barragán: ¿Es posible hacerse el gafo con el informe de DD. HH. – ONU?

Luis Barragán @LuisBarraganJ

El Informe de la Misión Internacional Independiente de determinación de los hechos sobre la República Bolivariana de Venezuela, recientemente difundido, todavía estremece al mundo. Ha llamado la atención de la opinión pública internacional y de mandatarios nacionales que están dispuestos a ayudarnos en las diligencias necesarias por ante la Corte Penal Internacional.

De una rigurosa metodología, precisión y comprobación de los casos, no deja duda alguna sobre la natural más íntima del régimen prevaleciente en Venezuela y constituye una severísima advertencia para los países todavía libres. No obstante, sirviendo de baremo, parece no repercutir en determinados sectores de la vida política venezolana.

En efecto, además del presidente interino, apenas tres aspirantes presidenciales han hecho mención especial del informe en cuestión. Y, permítannos expresarlo, la diputada Delsa Solórzano, además, presidente de la Comisión Especial de Justicia y Paz de la legítima Asamblea Nacional, especialista en la materia, realizó un sobrio, profundo y convincente análisis de los hechos relacionados y probados por la Misión Internacional Independiente, marcando pauta en las redes digitales.





Nadie espera que la usurpación haga una consideración seria de los hechos que la inculpan, ni que los alacranes y los variopintos colaboracionistas balbuceen algo en la materia, aunque deseen hacerse pasar como adversarios de Miraflores, pero algunos medios han contado hasta treinta los que se juran firmes (pre) candidatos presidenciales para 2024, o para antes o después, según lo decida Maduro Maduro Moros. Salvo tres personas, hasta nuevo aviso, el resto ha callado frente a la gravedad de los señalamientos comprobados.

Preguntas obligadas, ¿les será posible a estos aspirantes o a cualesquiera venezolanos, dentro y fuera del país, hacerse el gafo ante el Informe? ¿Acaso, es posible ocultar la inmensa tragedia que vive nuestro país y convertir en feria la campaña electoral que se avecina, comenzando por las primarias de la oposición? ¿Hacerse la vista gorda es sinónimo de una sofisticada habilidad política?