El presidente colombiano Iván Duque cree que el ingrediente faltante en la respuesta del hemisferio occidental a la pandemia fue el multilateralismo, y un acelerador en la propagación del virus fue el populismo.
Por: The Hill / Traducción libre del inglés por lapatilla.com
“En verdad, la lección que nos queda después de COVID-19 es que necesitábamos más multilateralismo para enfrentar esta crisis”, dijo Duque en una entrevista exclusiva con The Hill.
“Nuestra primera convicción: tomaremos decisiones basadas en la ciencia”, agregó Duque.
Colombia ha sido duramente golpeada por la crisis, convirtiendo un año que comenzó con un crecimiento proyectado del 4 por ciento del PIB en un lavado económico, con el gasto del gobierno elevando la deuda para financiar el cierre liderado por la pandemia.
Pero Colombia hasta ahora ha resistido la tormenta mejor que sus vecinos, sus 12.42 muertes por COVID-19 por cada 100,000 personas lo ubicaron entre Alemania y Portugal en términos globales, muy por debajo de México con 29.78 muertes, Brasil con 36.61 y Estados Unidos con 42.29 muertes. por 100.000 habitantes, según Johns Hopkins.
El abogado de 43 años, que pasó la mayor parte de su carrera profesional en Washington, dijo que COVID mostró la fuerza de un enfoque multilateral basado en la ciencia del gobierno.
Describió la decisión de congelar una economía bulliciosa como “quizás la decisión más difícil que hemos tomado”.
“Pero lo que nunca dudé fue que en ese momento teníamos que hacer todo, todo, primero para frenar la propagación exponencial del virus, segundo para proteger los sistemas de atención médica, tercero para proteger vidas, y obviamente para comenzar, basado en la ciencia, un proceso de reactivación ”, dijo Duque.
Si Duque levanta una ceja tácitamente sobre el enfoque estadounidense del coronavirus, adopta explícitamente el liderazgo estadounidense en la región, una estrategia que ha servido bien a Colombia durante dos décadas.
Duque no identificó a otros líderes regionales que rechazaron un enfoque técnico para combatir el coronavirus, con la excepción de Nicolás Maduro de Venezuela, cuyo desprecio abierto por las normas democráticas lo convirtió en el paria de la región.
Colombia ha recibido a casi 1,8 millones de refugiados venezolanos que huyen del gobierno de Maduro, lo que agota aún más su red de seguridad social en medio de la pandemia.
Duque dijo que la dictadura de Maduro “es el mayor desafío hemisférico en términos de protección de la democracia”.
“Es una dictadura oprobiosa y una expresión de tiranía que no conoce límites”, dijo Duque. “Asumió todos los poderes, destruyó el aparato económico, puso fin a las libertades, destruyó la libertad de prensa, destruyó la libre empresa y, sobre todo, ha atrincherado al frente del poder a un grupo de narcotraficantes que hoy son buscados como criminales por Autoridades de los Estados Unidos “.
Colombia es el vecino más cercano de Venezuela: la frontera de Venezuela con Brasil es técnicamente más larga, pero atraviesa principalmente áreas remotas de montaña y selva, y ha liderado la oposición regional a Maduro, una prioridad de política exterior de la administración Trump.
Con ese objetivo, Colombia se unió a Estados Unidos apoyando la reelección del Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, en marzo y ahora apoya la candidatura del Director Principal del Consejo de Seguridad Nacional (NSC) para el Hemisferio Occidental, Mauricio Claver-Carone, para convertirse en El próximo presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El BID, donde Duque trabajó durante más de una década, ha sido dirigido tradicionalmente por un presidente de América Latina y un vicepresidente ejecutivo de Estados Unidos.
La nominación de Claver-Carone para liderar el banco hizo que algunos en la región lloraran mal, argumentando que Trump usaría la influencia económica del banco para promover sus objetivos políticos en la región.
“Primero hablemos de las instituciones del banco. El banco no tiene prohibición en sus Artículos de Acuerdo para que un nacional de cualquier nación miembro presente su candidatura ”, dijo Duque.
“En segundo lugar, también creo que es importante que haya algún tipo de acuerdo político histórico, donde la presidencia fue a América Latina y la vicepresidencia ejecutiva a los Estados Unidos, pero no me parece inconveniente renovar ese acuerdo, porque esos acuerdos necesitan ser renovados “, agregó.
Duque promocionó los logros de Claver-Carone y las relaciones regionales que ha construido como jefe del hemisferio occidental para el NSC, donde encabezó la política de Venezuela de la administración Trump.
Y Duque señaló que un presidente estadounidense podría ayudar a avanzar en la recapitalización del banco, lo que no ha sucedido en 11 años, cuando Duque estaba entre los negociadores que trabajaron en la capitalización.
“El banco se ha quedado atrás en medio de las necesidades de América Latina, y mucho más lejos que las necesidades de reactivación después de la pandemia”, dijo Duque.
“Muchos países se han quejado por algún tiempo porque dicen que la capitalización no ha sucedido porque ha habido cierta distancia por parte del Departamento del Tesoro”, dijo.
Duque agregó que Estados Unidos posee el 30 por ciento del banco y alberga su sede en Washington.
“[Si] Estados Unidos quiere presidir un período para inyectar capital y responder a América Latina, encuentro una prueba clara de que el principal accionista en este momento quiere ayudar a crear una transformación positiva en el banco”, dijo Duque.
Debido a la postura pro-estadounidense sin complejos de Colombia, se ha vuelto más difícil para el país mantener su diplomacia de relaciones positivas “bipartidistas, bicamerales” en medio de una mayor división y rencor político en los Estados Unidos.
El 6 de julio, un grupo de 94 demócratas de la Cámara de Representantes encabezado por el Presidente del Comité de Reglas, Rep.James McGovern (D-Mass.) Escribió Secretario de Estado Mike Pompeo, denunciando el enfoque de la administración Duque en la implementación de los acuerdos de paz de 2016 que pusieron fin a su guerra con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
“Colombia es ahora el país más peligroso del mundo para los defensores de los derechos humanos”, escribió McGovern.
Duque, que fue elegido en gran medida por su oposición a la forma en que su predecesor, el ex presidente Juan Manuel Santos, negoció y comenzó a implementar los acuerdos, vio por primera vez la carta como política.
“En primer lugar, estamos en medio de un proceso electoral en los Estados Unidos, por lo que es un momento para cartas, discursos y comentarios, y lo entiendo”, dijo.
Pero Duque luego adoptó una actitud de litigante, enumerando cláusulas específicas del acuerdo que su administración cumplió en 24 meses en el cargo, y que Santos ‘no había avanzado en 20 meses desde la firma de los acuerdos.
Duque señaló que denunció los asesinatos en su discurso inaugural y que había trabajado para combatirlos, y agregó que los líderes de las FARC no habían cumplido sus acuerdos para informar sobre sus conexiones con los carteles de la droga y revelar la ubicación de las víctimas de secuestro asesinado.
Duque espera que Colombia siga siendo el aliado más cercano de Estados Unidos en la región, independientemente de las idas y venidas políticas en ambos países.
Y a pesar de la ruptura entre su administración y la de su predecesor, Duque ha seguido con el compromiso preexistente del país con el multilateralismo y la diplomacia regional.
Este año, Colombia debe asumir la presidencia de la Alianza del Pacífico, una asociación de Colombia, Chile, Perú y México, y recientemente se convirtió en miembro de pleno derecho de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
“Siempre he dicho que el mundo de hoy, en lugar de dividirse entre izquierda y derecha, creo que el mundo de hoy tiene demagogos y pedagogos”, dijo Duque.
“Los demagogos a menudo terminan convirtiendo a sus países en pan para hoy, hambre para mañana. Aquellos de nosotros que queremos ser pedagogos debemos ser capaces de transmitir a los ciudadanos qué desafíos enfrentamos, cuál es la verdad y cómo vamos a superarlos ”, agregó.