Luego de tantas polémicas desde el mismo momento en el que en el 2012 se colocó la piedra fundacional, el estadio de La Guaira contó con la presencia del gobernador del régimen, Jorge Luis García Carneiro, a 13 días para que se inaugure el complejo en el que harán vida los Tiburones de La Guaira.
“Hoy me siento feliz por muchas razones, el solo hecho de que se esté cumpliendo una meta, un sueño que se esté realizando, es una alegría para mí”, expresó el gobernador del estado La Guaira. Y fue aquí donde soltó la perla: “Le decimos al pueblo que aquí estamos, este no es el estadio de los Tiburones, este es el parque de la gente y ellos son los que deciden”.
El recinto deportivo no solo servirá para que los Tiburones disputen sus encuentros, sino que también contará con un centro comercial en el que habrá 50 locales comerciales, incluyendo un salón de bowling y una sala de cine.
Dijo también que “el centro comercial es lo que va a permitir que haya recursos para poder cubrir las necesidades del estadio. Para el mantenimiento se van a requerir un número grande de guaireños para poder mantener en óptimas condiciones su funcionamiento”.
Se pudo conocer que los empleados trabajan arduamente para intentar cumplir con la meta de entregarlo antes del 27 de diciembre, día en el que el gobernador Carneiro aseguró que estará listo el recinto para la voz del playball.
Otro de los cambios fue el nombre del parque: al principio, se llamaría Estadio “Café” Martínez, pero ahora se sustituyó por Estadio de La Guaira.
Una de las incertidumbres que invadió a las personas de la zona, e inclusive a los aficionados de los Tiburones, es el problema de los servicios de luz y de agua, debido a que en el sector son factores que a diario pueden faltar.
Sin embargo, en una entrevista para el canal del Estado, Venezolana de Televisión, argumentó el gobernador que cuentan con una subestación que les servirá para dar luz al estadio y a toda la parroquia de Macuto. Al igual que cuentan con unas mejoras en los conectores del agua que les permitirá brindar agua al municipio y, al mismo tiempo, al estadio.