El salario integral se quintuplicó, no resuelve los problemas y dispara la inflación

Foto Federico PARRA / AFP

 

A través de un mensaje de texto publicado por el presidente de la Comisión de los Trabajadores de la Constituyente cubana, Francisco Torrealba, el salario integral mensual aumentó a 300 mil bolívares, es decir, 150 mil bolívares el salario mínimo y 150 mil el bono de alimentación, lo que en criollo se traduce en que el ingreso de los trabajadores venezolanos se “quintuplicó”.

lapatilla.com / Con información de 2001





Este incremento -considerando que el salario mínimo estaba en 40 mil bolívares y 25 mil bolívares el bono alimentación- deberá ser cancelado por la empresa privada y organismos públicos con un retroactivo de la primera quincena de octubre, según la Gaceta Oficial Extraordinaria número 6.484 de fecha 11 de octubre de 2019; asimismo, mediante el Decreto número 3.998 se estableció que el incremento es obligatorio a partir del 1 de este mes.

Al respecto, las reacciones de los economistas no se ha hecho esperar, entre ellos Leonardo Buniak, quien afirmó que el ajuste salarial integral no solucionará la crisis económica. “Tenemos un proceso de hiperinflación que lo acompañamos con un aumento salarial, que no impacta a la estructura de costo del sector privado de la economía, ni al sector público, y obliga al BCV a hacer emisión monetaria de origen fiscal para financiar los incrementos de gastos”, explicó en una entrevista radial.

Por su parte, Jesús Casique, también señaló que estos aumentos nominales anunciados por el régimen de Nicolás Maduro deben “hacerse por los niveles de productividad y no por la inflación que atraviesa Venezuela. Este nuevo sueldo impactará considerablemente la inflación en el mercado. El Gobierno debe establecer disciplinas fiscales y monetarias” para que la producción aumente en la nación”.

Para el diputado José Guerra “el problema de raíz es que con este aumento los empleados continuarán en una situación difícil. “De nada te sirve ganar 300 mil bolívares si a los días los precios vuelven a aumentar y el salario se convierte en sal y agua”, mientras que para el presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, Alfonso Marquina, es “el Gobierno estatal quien deberá emitir dinero inorgánico para pagar las nóminas del sector público y de los jubilados y pensionados. Los venezolanos no resuelven su problema porque necesitan por lo menos 12 salarios para acceder a la canasta alimentaria”.

Sin embargo, para el director de Econométrica, Henkel García, afirmó que el aumento salarial tendrá un mínimo impacto en la nómina de las empresas privadas del país. Para el analista de finanzas, desde hace tiempo el sector privado paga este monto en la parte baja de su nómina.

En resumen, el salario básico de los venezolanos aumentó 275% y el bono de alimentación 500%, lo que es igual a un incremento de 775% con respecto al sueldo integral anterior de 65 mil bolívares que resultó de un ajuste de 122 % en mayo. Iniciando el año 2019, el salario básico se ubicaba en 18.000 bolívares más 1.800 de bono alimentación.

En Venezuela con el nuevo salario básico, un trabajador ganará diario 0,50 dólares y mensualmente 15,20 dólares. En este sentido, el Banco Mundial define a un individuo pobre cuando cobra menos de 1,90 diarios diarios.