Pensar que el aumento decretado por Nicolás Maduro este domingo 2 de julio resolverá siquiera en algo la crisis de hambre que sufre nuestro pueblo no es más que una trampa cazatontos.
Los procesos inflacionarios seguirán golpeando al bolsillo del venezolano. Las empresas y pequeños comercios nuevamente se verán obligados a reducir personal, porque ante la ausencia de producción difícil es mantenerse y eso lo sabe el gobierno, que busca seguir sus guisos de importaciones aunque sin dólares, porque ya se los robaron todos.
A este aumento se le une la equivocada decisión de continuar premiando a militares que irrespeten a las autoridades electas. No le basta con matar, con disparar armas contra los ciudadanos, contra los diputados, premia a los militares que dieron la espalda al pueblo al levantar sus armas contra el desvalido.
Maduro sigue aupando la corrupción mientras envía a sus esbirros a detener a jóvenes, a violar a detenidos, a robarles sus pertenencias, a vaciar sus cuentas bancarias y la de sus familias. Unidos vamos a salir de esta aberración, de esta dictadura de 18 años, no nos vamos a entregar a una dictadura.
A los soldados les digo, sólo los que no aman odian, y sabemos que son muchos los que no están de acuerdo con lo que sucede en nuestro país. Con el odio que han sembrado. Les pido luchemos por un país digno y noble, no hacerlo es apoyar a un dictador que esclaviza al pueblo. Fuerza y fe Venezuela
Luis Somaza Concejal de Baruta Voluntad Popular