Madres y representantes de alumnos de la Escuela Luis Beltrán Prieto Figueroa de 23 de Enero decidieron romper silencio y denunciaron que el 10 de noviembre, 17 niños del mencionado centro educativo resultaron intoxicados. El Siglo
Aseguraron que el suceso ocurrió a eso de las 8:00 de la mañana, sin embargo, por situaciones que ellas desconocen, a la mayoría de los representantes les avisaron en horas del mediodía.
Los escolares trasladados al ambulatorio del 23 de Enero fueron atendidos por los médicos de guardia, quienes diagnosticaron un cuadro de bronquitis.
El diagnóstico de los galenos originó un rotundo rechazo y causó más angustia en las madres, quienes aseguraron que sus hijos fueron llevados al centro asistencial con fiebre, vómito, dolor de cabeza y algunos hasta se desmayaron, síntomas que no se corresponden con bronquitis.
Ante esta grave situación que se mantuvo en silencio durante tres días, los profesores se vieron obligados a suspender las clases, esperando la llegada de los bomberos, Corposalud, autoridades de la Zona Educativa y de la Alcaldía de Girardot, no obstante nunca llegaron.
“Nos responsabilizamos por lo que denunciamos, desde el lunes 10 de noviembre en la Escuela Luis Beltrán Prieto Figueroa, de 23 de Enero nuestros niños, al menos unos 17 presentaron síntomas de intoxicación, algunos se desmayaron, tenían vómito, otros convulsionaron, pensamos que dentro del colegio hay algún gas contaminante seguramente proveniente de las cloacas, pero nadie nos dice nada, ni siquiera han elaborado un informe”, denunció Yarelis Quevedo.