“Se cumplió el objetivo en casa”, dijo Henry Paruta, Director Técnico de Marinos de Anzoátegui. El conjunto naval venció por segunda noche corrida a Cocodrilos de Caracas en el gimnasio Luis Ramos de Puerto La Cruz, gracias a un triple de Leon Rodgers restando siete segundos, que dejó el marcador 79 x 77 a favor de los orientales.
Ahora los anzoatiguenses tienen ventaja de 2-0 en la final y podrán viajar a Caracas, en donde se efectuarán los próximos tres partidos, con la tranquilidad de saber que tienen garantizado un retorno a su feudo en caso de que la serie se extienda.
Cocodrilos tuvo el partido en sus manos cuando el base de Marinos, Gregory Vargas, falló un tiro libre restando 25 segundos, que mantuvo a los capitalinos al frente 76 x 77, pero tras recuperar el rebote, el armador Jesús “Zancudo” Centeno hizo un pase comprometido a Luis Bethelmi y el balón salió por la línea de fondo a favor de los locales.
Luego de recuperar la posesión, Paruta, el estratega del Acorazado Oriental, solicitó un descuento de tiempo y diagramó una jugada que sus dirigidos ejecutaron a pedir de boca.
“La orden fue que Gregory atacara el canasto y sacara el balón para que Leon tomara el tiro y él estuvo listo”, indicó el coach. Así fue, Vargas penetró y pasó a Rodgers, quien no perdonó desde el costado izquierdo.
Cocodrilos tuvo una última ofensiva y decidió atacar el canasto con su mejor hombre Andre Emmett, quien había anotado 35 puntos, 20 en el último cuarto, para imponer una marca en finales, pero no pudo embocar su disparo.
Por los capitalinos, reapareció Centeno luego de una semana de descanso por su lesión en el pubis. También entró al roster el alero Ryan Forehan-Kelly en lugar de Carl Elliott. Esa combinación hizo lucir mejor al equipo saurio, pero no les alcanzó. Ahora tienen que responder en su cancha sí o sí.